Espanu. La afición española quiso estar a la altura de su selección de fútbol y mejoró celebraciones pasadas. Más jolgorio que tras la victoria en la Eurocopa de Austria 2008, mayor entrega que en el Mundial de Sudáfrica 2010. Un millón de personas rellenaron, sin fisuras, el centro de Madrid, todas perfectamente ataviadas. No había nadie que no se hubiera enfundado una camiseta roja y se pudieron ver miles de banderas de España de todos los tamaños. La marea fue un hecho impresionante para contemplar desde el aire y emocionante de vivir desde tierra. [Así les contamos la fiesta]
El epicentro de la celebración fue la plaza de la diosa Cibeles. Allí, desde las tres del mediodía esperaba una enorme cantidad de seguidores de España. Aguantaron siete horas bajo el sol que animaron los manguerazos de los bomberos y conciertos de artistas como Chenoa, Melendi o Huecco. Los cánticos se repetían. Se iba desde los clásicos “Yo soy español” o “Qué viva España” hasta el actualizado “Italiano en el que no bote” aunque el más repetido fue el simple pero más que animado “Campeones, campeones”. Cuando llegaron los Iker Casillas, Andrés Iniesta y compañía, la gente ya no podía tener el ánimo más alto.
Visite El Mundo a lese totu artiklu, grazu!
© 2012 Amiki d'Eulingu
No comments:
Post a Comment